A pura birraViernes, 17 de junio de 2016Para alegría de los fanáticos de la cerveza, en el 2015 en Buenos Aires surgió un “boom” de cervecerías artesanales que siguen creciendo noche a noche. Una cronista recorrió diez lugares recomendables.
El auge de la cerveza artesanal se dio principalmente porque los pequeños productores, en general grupos de amigos que fabrican su propia cerveza por diversión, entraron en escena y pusieron su lugarcito, o la empezaron a vender en bares especializados o hamburgueserías que la tienen como opción para acompañar las poderosas hamburguesas.
Palermo, barrio porteño “vanguardista” por excelencia, es uno de los territorios fundamentales de la movida. A continuación una lista de 10 bares que nos gustan y que ofrecen “happy hour”, momento ideal para degustar una buena cerveza con un amigo, cita, familiar o aun un desconocido.
Baum, de Mar del Plata con amor. Cervecería abierta mucho antes del “boom cervecero”, original de Mar del Plata. Las cervezas vienen en los clásicos estilos (Blonde Ale, Scottish, Porter, Honey, Old Ale, IPA y una que va variando) y son de muy buena calidad. Territorio concurrido por jóvenes con onda “bolichera”. El ambiente es muy amplio y clásico, con dos pisos, luz tenue, grandes pantallas dónde pasan algunos partidos, barra, terraza y mesitas en la calle para el verano. Otro punto a favor es el crocante y adictivo maní japonés que traen para acompañar la cerveza.
Dato: De lunes a viernes hay 2×1 personal en cerveza tirada de 18 a 20, y los fines de semana de 19 a 21. Los miércoles las mujeres pueden disfrutar de la promoción toda la noche. Dos pintas por $ 67 ó $ 77, dependiendo de la variedad de cerveza. Honduras 5720. Abre de lunes a miércoles de 18 a 2, jueves hasta las 3, viernes hasta las 4, sábados de 19 a 4 y domingos de 19 a 2. Tel: 3598-7286.
Blue Dog, vanguardia cervecera. Nuevo reducto, pequeño pero con más de diez variedades de cervezas artesanales (y una sidra en verano) de marcas como Grunge, Berlina, La Cruz, y otras que van variando. Generalmente tienen más de una IPA para aquellos fanáticos del sabor amargo y del alto contenido alcohólico. Ofrecen para acompañar platos bien originales como camembert relleno de rúcula y almendras con papas españolas, y “chocobrownie”, mezcla de brownie y chocotorta, para los bajoneros más golosos. Muy buena atención, sillas y mesas de madera tipo “camping”, con un look moderno, ambientado con fotos y carteles en las paredes. Dato: El happy hour es de 18 a 20:30 y consiste en una rebaja, a $45 la pinta, que normalmente está entre $ 60 y $ 65. Gorriti 4758. Abre de martes a domingos de 18 a 00:30.
Cervecería Nacional, pequeña pero poderosa. Bar de moda muy chiquito, algo que al público habitué (muchos del mundo audiovisual, trabajadores de productoras de la zona) no parece molestarle. Se los ve sentados en la vereda o tomando cerveza de parado como si se encontraran en cualquier vereda de Europa, a pesar del frío. Hay gran variedad de cervezas nacionales (no importadas) en formato porrón, botella de 660 cc o de litro, y por supuesto, artesanal tirada, marca 7 Colores, infalible. También ofrecen picadas, pizzas y empanadas caseras como la de ossobuco, que es un éxito. Los martes de “Santa Bondiola” preparan este plato (tan tierno que no hace falta cuchillo). Para este evento es mejor reservar ya que los cupos se agotan. La pequeña barra está a cargo del dueño y alma máter, Leandro, y sus dos compañeros Hernán y Jochi que, si bien siempre están a full, te atienden con toda la buena onda, y te rellenan el maní una y otra vez. Dato: El happy hour es sólo en cerveza tirada, la pinta sale $ 50 en vez de $ 65, y va desde las 18 hasta las 20:30. Arévalo 1588. Abre de martes a jueves de 18 a 00 y viernes y sábados hasta la 1. Tel: 4771-3383. Tel: 4771-3383
Cervelar Palermo, un trago de mitad de semana. Último local abierto de esta cervecería con ya cinco sucursales en la ciudad. Hay más de 200 cervezas distintas para elegir, pero entre las 12 tiradas se destacan la Black Honey de Dust (marinada con Jack Daniels) y la frutal Tripel de Deleuze. Si vas acompañado de un niño o alguien con alma de niño, el milshake de dulce de leche sale lo mismo que una pinta y es empalagoso, enorme y riquísimo. Volviendo a la cerveza, hay bidones 1,9 litros que se pueden cargar con cualquier estilo de las tiradas para llevar a tu casa. En sus dos pisos, tiene distintos ambientes, desde el interior bastante ruidoso a las mesas en la vereda ideales para conversar más tranquilo. Dato: El happy hour rebaja el valor de la pinta a $45 (algunas llegan a los $78 más tarde), y es de 18 a 20, con el plus de que los miércoles se extiende hasta la medianoche. Una salida para cortar la semana. J. A. Cabrera 4399. Abre todos los días de 18 a 3. Tel: 4831-9060
Hops, para sentirse como en casa. Vale la pena desviarse unas cuadras de Palermo para entrar en este rincón mágico de Villa Crespo. Ocho estilos de cervezas artesanales de productores locales como Nachber y 1036, que van rotando con frecuencia. La sirven bien fría y siempre acompañada de maní, que los mozos rellenan siempre que lo pidas o te vean con cara de querer más. También hay papas bravas, picadas, pizzas y las originales empanadas de goulash para reforzar el espíritu barrial. Todo caserito y administrado por su dueño Iñaki. Dato: Los precios son amigables, sobre todo en happy hour, cuando una pinta es más barata que media, a sólo $45. Esto ocurre desde las 18 hasta las 21 (pero si la pedís 21:15 no creo que te hagan lío). Más tarde, la pinta cuesta $ 65. Castillo 422. Abre de martes a sábados de 18 a 2.
Lo de Cholo, familiar, informal y radical. En una zona algo escondida de Palermo, cerca de la parrilla La Cabrera, se encuentra este pequeño y amigable reducto. Es atendido por sus dueños Diego y Lucía Converti, y su primo Guido Dennin. Hay 5 ó 6 variedades de cerveza tirada que van rotando. La mayoría son de productores locales que les llevan a Diego y Lucía una muestra de prueba y, si les gusta, es incluida temporalmente en la pizarra. La pinta es acompañada de maní bien salado. También hay porrones de otras cervezas artesanales, como Antares, Gante, Gambrinic e Hipólita, producida por un amigo de Diego, Leandro Villani Mancuello, radical como él. Esta cerveza de nombre y prosapia radical solía competir con la “peronista”, que venden en el restaurante Perón Perón, del chef Gonzalo Alderete Pagés y según su productor, “era siempre la ganadora, pues es una cerveza para los que no se doblan”. El porrón sale $ 50. Dato: El happy hour rebaja el valor de la pinta a sólo $ 40 (normalmente $ 60) y es de 18 a 21, pero los miércoles se extiende toda la noche. J. A. Cabrera 5185. Abre miércoles y jueves de 18 a 00 y viernes y sábado hasta la 1.
Morante, una rareza en territorio bolichero. Cervecería bien artesanal en pleno Palermo bolichero. Todas las cervezas son de fabricación propia, hay 12 estilos, algunos fijos y otros estacionales (para el frío una Imperial Stout bien alcohólica). Su dueño Wensi tiene muy buena onda y va de aquí a allá observando que todo funcione bien. La música es onda de radio y está a un volumen perfecto para poder charlar. El ambiente es amplio, con luces bajas. Pero lo que más atrae clientes es la terraza, bien grande, y que en invierno está calefaccionada. Hay botellones de 5 litros para comprar y cargar y recargar, y ser el amo del asado. De la cocina salen nachos con queso fundido o guacamole, papas fritas con dips bien variados, sándwiches, pizzas y hamburguesas. También ofrecen el postre de la casa: un brownie de cerveza Porter. Dato: El happy hour rebaja el valor de la pinta a $ 40, $ 45 y $ 50, dependiendo del estilo, y es desde que abre hasta las 21 (bien extendido para la zona). Godoy Cruz 1781. Abre de lunes a viernes de 18 a 2 y sábados de 19 a 3. Tel: 2056-9221
Nola, de paseo por New Orleans. Cerveza tirada marca Broeders, en sus cuatro estilos: Golden Ale, Irish Red Ale, India Pale y Dry Stout, más una estacional, todas con gran carácter. El morfi es un punto aparte: la especialidad de la casa es la comida cajún, típica de New Orleans (el nombre del local es una abreviatura de esta ciudad). Platos en general picantes, porotos rojos con arroz, sándwich de pollo frito, gumbo (estofado de chorizo, pollo y arroz), en los cuales se nota la impronta de la dueña y chef Liza, oriunda de Louisiana. El lugar es chiquito y la ambientación moderna, con mesas redondas de metal. Hay un par en la vereda, que a la noche suele estar repleta de gente parada tomando cerveza, tragos, vino, y hasta comiendo. Dato: En happy hour la pinta rebaja su valora $ 45 en vez de $ 65, y va de 17 a 20.
Gorriti 4389. Abre de lunes a viernes de 17 a 00 y fin de semana, desde las 13.
On Tap, gran variedad de cervezas entre gran cantidad de gente. Cervecería con 20 canillas con cervezas artesanales producidas por microcervecerías locales, que van rotando. Imposible que no te guste ninguna: suaves, fuertes, amargas, negras, rojas, rubias, dulces, frutales… Se pide en el mostrador, y si ordenaste algo para comer, gritan tu nombre cuando está listo. Es un local no muy grande, y suele estar abarrotado de gente joven adentro y en la vereda. Los martes son más tranquilos. Tiene tres sucursales: en Colegiales (Freire 1101), en Belgrano (Cuba 2491) y San Telmo (Av. Caseros 482). Dato: El happy hour rebaja el valor de la pinta (normalmente a $70) a $50, y es de 18 a 20:30. Costa Rica 5527. Abre domingos, martes y miércoles de 18 a 00 y jueves a sábados hasta la 1. Tel: 4771 5424
Otra Vuelta, el sueño de todo vikingo. Muy pequeño local que solo cuenta con una barra, una mesa alta con seis sillas, y una para dos en la vereda. Sus dueños son Copito y Batata, dos metaleros que le dieron a la ambientación un estilo medieval y moderno al mismo tiempo. Pero el espacio no es lo que destaca, sino la buena onda con la que atienden, la música (metal o rock) nunca elegida al azar, y las cervezas tiradas. Son marca 7 Colores, hay rubia, roja y negra, son muy ricas, están bien frías y vienen acompañadas de papas de paquete para salar la boca y seguir tomando. A pesar de que los bancos no sean tan cómodos, uno puede pasar horas charlando por lo ameno que resulta. También hay algunas cervezas nacionales e importadas de marcas como Estrella Damm, Schofferhofer, Skoll y Otro Mundo, dispuestas en una heladera a la vista. Para comer las opciones van de las papas o picadas a las empanadas de cordero, todo muy abundante. Dato: El happy hour es personal (2 pintas por $ 70) y se extiende de 19 a 21. Precios muy amables considerando el barrio. Gurruchaga 1324. Abre de martes a jueves de 18 a 00:30 y viernes y sábados hasta las 2.
En esta ruta hay opciones para todos los gustos: cervezas lager de baja fermentación y menos eclécticas en su sabor; cervezas Ale de alta fermentación que suelen tener aromas y sabores frutales y florales, fuertes (la mayoría de las cervezas belgas, las de trigo, la Stout y la Porter son hechas de esta forma); Cervezas IPA (Indian Pale Ale) o APA (Amber Pale Ale): con mucho contenido de lúpulo y alcohol, suelen ser las más amargas y refrescantes; y finalmente las cervezas de trigo que se distinguen por ser muy ácidas, con un sabor frutal característico.
Aclaración: los precios están actualizados al 14 de junio de 2016.
Para alegría de los fanáticos de la cerveza, en el 2015 en Buenos Aires surgió un “boom” de cervecerías artesanales que siguen creciendo noche a noche. Una cronista recorrió diez lugares recomendables.
El auge de la cerveza artesanal se dio principalmente porque los pequeños productores, en general grupos de amigos que fabrican su propia cerveza por diversión, entraron en escena y pusieron su lugarcito, o la empezaron a vender en bares especializados o hamburgueserías que la tienen como opción para acompañar las poderosas hamburguesas.
Palermo, barrio porteño “vanguardista” por excelencia, es uno de los territorios fundamentales de la movida. A continuación una lista de 10 bares que nos gustan y que ofrecen “happy hour”, momento ideal para degustar una buena cerveza con un amigo, cita, familiar o aun un desconocido.
Baum, de Mar del Plata con amor. Cervecería abierta mucho antes del “boom cervecero”, original de Mar del Plata. Las cervezas vienen en los clásicos estilos (Blonde Ale, Scottish, Porter, Honey, Old Ale, IPA y una que va variando) y son de muy buena calidad. Territorio concurrido por jóvenes con onda “bolichera”. El ambiente es muy amplio y clásico, con dos pisos, luz tenue, grandes pantallas dónde pasan algunos partidos, barra, terraza y mesitas en la calle para el verano. Otro punto a favor es el crocante y adictivo maní japonés que traen para acompañar la cerveza.
Dato: De lunes a viernes hay 2×1 personal en cerveza tirada de 18 a 20, y los fines de semana de 19 a 21. Los miércoles las mujeres pueden disfrutar de la promoción toda la noche. Dos pintas por $ 67 ó $ 77, dependiendo de la variedad de cerveza. Honduras 5720. Abre de lunes a miércoles de 18 a 2, jueves hasta las 3, viernes hasta las 4, sábados de 19 a 4 y domingos de 19 a 2. Tel: 3598-7286.
Blue Dog, vanguardia cervecera. Nuevo reducto, pequeño pero con más de diez variedades de cervezas artesanales (y una sidra en verano) de marcas como Grunge, Berlina, La Cruz, y otras que van variando. Generalmente tienen más de una IPA para aquellos fanáticos del sabor amargo y del alto contenido alcohólico. Ofrecen para acompañar platos bien originales como camembert relleno de rúcula y almendras con papas españolas, y “chocobrownie”, mezcla de brownie y chocotorta, para los bajoneros más golosos. Muy buena atención, sillas y mesas de madera tipo “camping”, con un look moderno, ambientado con fotos y carteles en las paredes. Dato: El happy hour es de 18 a 20:30 y consiste en una rebaja, a $45 la pinta, que normalmente está entre $ 60 y $ 65. Gorriti 4758. Abre de martes a domingos de 18 a 00:30.
Cervecería Nacional, pequeña pero poderosa. Bar de moda muy chiquito, algo que al público habitué (muchos del mundo audiovisual, trabajadores de productoras de la zona) no parece molestarle. Se los ve sentados en la vereda o tomando cerveza de parado como si se encontraran en cualquier vereda de Europa, a pesar del frío. Hay gran variedad de cervezas nacionales (no importadas) en formato porrón, botella de 660 cc o de litro, y por supuesto, artesanal tirada, marca 7 Colores, infalible. También ofrecen picadas, pizzas y empanadas caseras como la de ossobuco, que es un éxito. Los martes de “Santa Bondiola” preparan este plato (tan tierno que no hace falta cuchillo). Para este evento es mejor reservar ya que los cupos se agotan. La pequeña barra está a cargo del dueño y alma máter, Leandro, y sus dos compañeros Hernán y Jochi que, si bien siempre están a full, te atienden con toda la buena onda, y te rellenan el maní una y otra vez. Dato: El happy hour es sólo en cerveza tirada, la pinta sale $ 50 en vez de $ 65, y va desde las 18 hasta las 20:30. Arévalo 1588. Abre de martes a jueves de 18 a 00 y viernes y sábados hasta la 1. Tel: 4771-3383. Tel: 4771-3383
Cervelar Palermo, un trago de mitad de semana. Último local abierto de esta cervecería con ya cinco sucursales en la ciudad. Hay más de 200 cervezas distintas para elegir, pero entre las 12 tiradas se destacan la Black Honey de Dust (marinada con Jack Daniels) y la frutal Tripel de Deleuze. Si vas acompañado de un niño o alguien con alma de niño, el milshake de dulce de leche sale lo mismo que una pinta y es empalagoso, enorme y riquísimo. Volviendo a la cerveza, hay bidones 1,9 litros que se pueden cargar con cualquier estilo de las tiradas para llevar a tu casa. En sus dos pisos, tiene distintos ambientes, desde el interior bastante ruidoso a las mesas en la vereda ideales para conversar más tranquilo. Dato: El happy hour rebaja el valor de la pinta a $45 (algunas llegan a los $78 más tarde), y es de 18 a 20, con el plus de que los miércoles se extiende hasta la medianoche. Una salida para cortar la semana. J. A. Cabrera 4399. Abre todos los días de 18 a 3. Tel: 4831-9060
Hops, para sentirse como en casa. Vale la pena desviarse unas cuadras de Palermo para entrar en este rincón mágico de Villa Crespo. Ocho estilos de cervezas artesanales de productores locales como Nachber y 1036, que van rotando con frecuencia. La sirven bien fría y siempre acompañada de maní, que los mozos rellenan siempre que lo pidas o te vean con cara de querer más. También hay papas bravas, picadas, pizzas y las originales empanadas de goulash para reforzar el espíritu barrial. Todo caserito y administrado por su dueño Iñaki. Dato: Los precios son amigables, sobre todo en happy hour, cuando una pinta es más barata que media, a sólo $45. Esto ocurre desde las 18 hasta las 21 (pero si la pedís 21:15 no creo que te hagan lío). Más tarde, la pinta cuesta $ 65. Castillo 422. Abre de martes a sábados de 18 a 2.
Lo de Cholo, familiar, informal y radical. En una zona algo escondida de Palermo, cerca de la parrilla La Cabrera, se encuentra este pequeño y amigable reducto. Es atendido por sus dueños Diego y Lucía Converti, y su primo Guido Dennin. Hay 5 ó 6 variedades de cerveza tirada que van rotando. La mayoría son de productores locales que les llevan a Diego y Lucía una muestra de prueba y, si les gusta, es incluida temporalmente en la pizarra. La pinta es acompañada de maní bien salado. También hay porrones de otras cervezas artesanales, como Antares, Gante, Gambrinic e Hipólita, producida por un amigo de Diego, Leandro Villani Mancuello, radical como él. Esta cerveza de nombre y prosapia radical solía competir con la “peronista”, que venden en el restaurante Perón Perón, del chef Gonzalo Alderete Pagés y según su productor, “era siempre la ganadora, pues es una cerveza para los que no se doblan”. El porrón sale $ 50. Dato: El happy hour rebaja el valor de la pinta a sólo $ 40 (normalmente $ 60) y es de 18 a 21, pero los miércoles se extiende toda la noche. J. A. Cabrera 5185. Abre miércoles y jueves de 18 a 00 y viernes y sábado hasta la 1.
Morante, una rareza en territorio bolichero. Cervecería bien artesanal en pleno Palermo bolichero. Todas las cervezas son de fabricación propia, hay 12 estilos, algunos fijos y otros estacionales (para el frío una Imperial Stout bien alcohólica). Su dueño Wensi tiene muy buena onda y va de aquí a allá observando que todo funcione bien. La música es onda de radio y está a un volumen perfecto para poder charlar. El ambiente es amplio, con luces bajas. Pero lo que más atrae clientes es la terraza, bien grande, y que en invierno está calefaccionada. Hay botellones de 5 litros para comprar y cargar y recargar, y ser el amo del asado. De la cocina salen nachos con queso fundido o guacamole, papas fritas con dips bien variados, sándwiches, pizzas y hamburguesas. También ofrecen el postre de la casa: un brownie de cerveza Porter. Dato: El happy hour rebaja el valor de la pinta a $ 40, $ 45 y $ 50, dependiendo del estilo, y es desde que abre hasta las 21 (bien extendido para la zona). Godoy Cruz 1781. Abre de lunes a viernes de 18 a 2 y sábados de 19 a 3. Tel: 2056-9221
Nola, de paseo por New Orleans. Cerveza tirada marca Broeders, en sus cuatro estilos: Golden Ale, Irish Red Ale, India Pale y Dry Stout, más una estacional, todas con gran carácter. El morfi es un punto aparte: la especialidad de la casa es la comida cajún, típica de New Orleans (el nombre del local es una abreviatura de esta ciudad). Platos en general picantes, porotos rojos con arroz, sándwich de pollo frito, gumbo (estofado de chorizo, pollo y arroz), en los cuales se nota la impronta de la dueña y chef Liza, oriunda de Louisiana. El lugar es chiquito y la ambientación moderna, con mesas redondas de metal. Hay un par en la vereda, que a la noche suele estar repleta de gente parada tomando cerveza, tragos, vino, y hasta comiendo. Dato: En happy hour la pinta rebaja su valora $ 45 en vez de $ 65, y va de 17 a 20.
Gorriti 4389. Abre de lunes a viernes de 17 a 00 y fin de semana, desde las 13.
On Tap, gran variedad de cervezas entre gran cantidad de gente. Cervecería con 20 canillas con cervezas artesanales producidas por microcervecerías locales, que van rotando. Imposible que no te guste ninguna: suaves, fuertes, amargas, negras, rojas, rubias, dulces, frutales… Se pide en el mostrador, y si ordenaste algo para comer, gritan tu nombre cuando está listo. Es un local no muy grande, y suele estar abarrotado de gente joven adentro y en la vereda. Los martes son más tranquilos. Tiene tres sucursales: en Colegiales (Freire 1101), en Belgrano (Cuba 2491) y San Telmo (Av. Caseros 482). Dato: El happy hour rebaja el valor de la pinta (normalmente a $70) a $50, y es de 18 a 20:30. Costa Rica 5527. Abre domingos, martes y miércoles de 18 a 00 y jueves a sábados hasta la 1. Tel: 4771 5424
Otra Vuelta, el sueño de todo vikingo. Muy pequeño local que solo cuenta con una barra, una mesa alta con seis sillas, y una para dos en la vereda. Sus dueños son Copito y Batata, dos metaleros que le dieron a la ambientación un estilo medieval y moderno al mismo tiempo. Pero el espacio no es lo que destaca, sino la buena onda con la que atienden, la música (metal o rock) nunca elegida al azar, y las cervezas tiradas. Son marca 7 Colores, hay rubia, roja y negra, son muy ricas, están bien frías y vienen acompañadas de papas de paquete para salar la boca y seguir tomando. A pesar de que los bancos no sean tan cómodos, uno puede pasar horas charlando por lo ameno que resulta. También hay algunas cervezas nacionales e importadas de marcas como Estrella Damm, Schofferhofer, Skoll y Otro Mundo, dispuestas en una heladera a la vista. Para comer las opciones van de las papas o picadas a las empanadas de cordero, todo muy abundante. Dato: El happy hour es personal (2 pintas por $ 70) y se extiende de 19 a 21. Precios muy amables considerando el barrio. Gurruchaga 1324. Abre de martes a jueves de 18 a 00:30 y viernes y sábados hasta las 2.
En esta ruta hay opciones para todos los gustos: cervezas lager de baja fermentación y menos eclécticas en su sabor; cervezas Ale de alta fermentación que suelen tener aromas y sabores frutales y florales, fuertes (la mayoría de las cervezas belgas, las de trigo, la Stout y la Porter son hechas de esta forma); Cervezas IPA (Indian Pale Ale) o APA (Amber Pale Ale): con mucho contenido de lúpulo y alcohol, suelen ser las más amargas y refrescantes; y finalmente las cervezas de trigo que se distinguen por ser muy ácidas, con un sabor frutal característico.
Aclaración: los precios están actualizados al 14 de junio de 2016.