Pulpería Quilapán: otra historia que parte el almaViernes, 16 de octubre de 2020Muchas penurias están padeciendo los gastronómicos. Como si la pandemia no fuera suficiente, una vez más la industria del juicio hace de las suyas. Esta historia está contada por el "pulpero", que acaba de perder un juicio por ser solidario.
En Fondo de Olla © hemos publicado varias notas sobre Pulpería Quilapán. Como queremos ir al grano directamente y entender lo que ha ocurrido de la propia boca de la víctima, les dejamos sendos links para que quienes no la conocen sepan quiénes son sus protagonistas y qué es lo que hacen:
https://www.fondodeolla.com/nota/quilapan-la-pulperia-urbana/;
https://www.fondodeolla.com/nota/14149-pulperia-quilapan-el-viejo-almacen/.
Ahora nos ponemos en tema. Esto dice el "pulpero", francés, pero más porteño que alguien nacido en esta ciudad:
"Perdón por mi silencio. Estuvimos bien ocupados para adaptarnos a esta tormenta. Y aunque vaya si tronó y diluvió, no cambiamos. Seguimos amasando, fritando y horneando. Seguimos. Como en la vida misma. Con sabores de los buenos y de los no tan buenos. De los dulces y los amargos. Con las de cal y arena, como dicen por ahí. Por eso, esta familia pulpera de la que ya es parte, le comparte tanto las buenas como las malas".
LA MALA
"Un ‘episodio trágico' que hizo entender al pulpero, hay personas curiosas, de esas que algunas veces no se llegan a entender pero con las cuales tenemos que convivir. El combate PULPERÍA QUILAPÁN VS ANTONIO TURNES se perdió el 24 de septiembre de 2020. ¿En qué consistió?".
"Retrato de nuestros protagonistas: el pulpero lee Página 12, pero está abonado al Clarín. Antonio lee La Nación y está abonado a Perfil. El pulpero es pulpero en la pulpería ubicada en Defensa 1344, pleno San Telmo. Antonio es jubilado de una sala de juego clandestina, vive en La Boca. Solo que, para nosotros, el pasado no condena; pues siempre puede redimirse. Claro, siempre que se quiera... Antonio es amigo de nuestro camarero Luis. Perdió su último trabajo a los 70 años, cuando cerró el Restaurante El Establo. Toda su vida había trabajado en negro. Lloró y el pulpero lo escuchó. Quería tener una parte de su sueldo no declarada por razones personales (¿para seguir cobrando subsidio?). El pulpero no dudó de la palabra de un hombre mayor, con la pesadumbre de un pasado militar en las islas Malvinas".
"Antonio se peinó y trabajó. Protagonizó nueve meses de terror en la pulpería. Por cierto, una babel a corazón abierto: la pulpería es la diversidad a toda honra, con más de nueve nacionalidades. Un camarero haitiano llamado Wellington me preguntó por qué no recibía las propinas que todo el equipo de la pulpería se comparte por igual. Antonio me contestó: ‘¿propina para un negro?'. Distintas veces veía su nariz roja, oliendo fuerte a alcohol. Me decía que debía estar triste y que mejor no empeorar el caso. La comprensión ante todo. ‘Antonio vuelve a casa para descansar". Nos vemos mañana".
"La pulpería incluye y promueve la inclusión. Distintas veces sus compañeros de trabajo me comentaron, avergonzados, que Antonio no quería atender mesa cuando pensaba que los comensales eran homosexuales. En la pulpería apoyamos la igualdad de género, contando con siete mujeres en nuestro equipo de trabajo. Antonio no las escuchaba y hasta podía llegar insultarlas, a miserable honra. La pulpería integra personas con discapacidades. Antonio se burlaba de las diferencias y yo fui testigo de una pareja de gente de pequeña altura a la cual decía: ‘para los enanos todo está reservado'. Por supuesto, cada una de estas situaciones inadmisibles era seguida de charlas sin fin, para explicarle por qué no compartimos estos valores y que él tenía que adaptarse".
"Antonio tuvo una verruga plantar. No vino a trabajar sin justificativo médico durante tres meses. Después nos envió una carta documento estipulando que estaba mal registrado e inició un juicio al pulpero. Tres años después de los hechos, la Jueza Nacional Patricia Silvia Russo intimó a nuestra Pulpería Quilapán a pagar $1.295.058 al demandante. O sea, 33.000 empanadas ó más de 4.000 pingüinos de vino patero. El pulpero felicita a Antonio Turnes y a su abogado Jorge Ferdman por esta victoria".
LAS BUENAS
"Más de 5.000 viandas gratis entregadas al personal médico y al comedor de San Telmo desde el principio del año. Fuimos seleccionados por el Ministerio de Turismo para recibir el Fondo de Auxilio y Capacitación Turística del Banco Interamericano de Desarrollo. Esto nos permitió capacitar a nuestro equipo y prepararnos para el mundo postpandemia".
"Esta ayuda nos va a permitir":
Instalar más termotanques solares sobre el techo y calentar el 100% de agua al sol.
Terminar el museo de la pulpería y dar a conocer los hallazgos que descubrimos en el pozo tapado allá por 1871, después de la epidemia de fiebre amarilla.
Habilitar el jardín y el Salón Macoco de la pulpería como Centro Cultural Independiente y bailar chacarera.
También estamos orgullosos de ser parte de los "Héroes de la cancha y de la vida" de la Copa CONMEBOL Libertadores.
"Héroe: persona común que enfrenta circunstancias extraordinarias, impulsado por el amor, la compasión y la empatía. Les deseo amor, compasión y empatía. Seamos héroes. Hagásmoslo juntos".
Esta es la historia. Qué difícil es ser gastronómico. Qué injusta es la Justicia, a veces. Qué costoso resulta ser solidario. Qué mala es cierta gente. Fuerza Pulpería Quilapán, la siguen peleando y son un ejemplo de superación. Cuando muchos de nosotros nos queremos rajar porque esto es un caos, esta pareja de franceses se aquerendó en estas tierras y la pelea contra viento y marea. Se merecen lo mejor.
Muchas penurias están padeciendo los gastronómicos. Como si la pandemia no fuera suficiente, una vez más la industria del juicio hace de las suyas. Esta historia está contada por el "pulpero", que acaba de perder un juicio por ser solidario.
En Fondo de Olla © hemos publicado varias notas sobre Pulpería Quilapán. Como queremos ir al grano directamente y entender lo que ha ocurrido de la propia boca de la víctima, les dejamos sendos links para que quienes no la conocen sepan quiénes son sus protagonistas y qué es lo que hacen:
https://www.fondodeolla.com/nota/quilapan-la-pulperia-urbana/;
https://www.fondodeolla.com/nota/14149-pulperia-quilapan-el-viejo-almacen/.
Ahora nos ponemos en tema. Esto dice el "pulpero", francés, pero más porteño que alguien nacido en esta ciudad:
"Perdón por mi silencio. Estuvimos bien ocupados para adaptarnos a esta tormenta. Y aunque vaya si tronó y diluvió, no cambiamos. Seguimos amasando, fritando y horneando. Seguimos. Como en la vida misma. Con sabores de los buenos y de los no tan buenos. De los dulces y los amargos. Con las de cal y arena, como dicen por ahí. Por eso, esta familia pulpera de la que ya es parte, le comparte tanto las buenas como las malas".
LA MALA
"Un ‘episodio trágico' que hizo entender al pulpero, hay personas curiosas, de esas que algunas veces no se llegan a entender pero con las cuales tenemos que convivir. El combate PULPERÍA QUILAPÁN VS ANTONIO TURNES se perdió el 24 de septiembre de 2020. ¿En qué consistió?".
"Retrato de nuestros protagonistas: el pulpero lee Página 12, pero está abonado al Clarín. Antonio lee La Nación y está abonado a Perfil. El pulpero es pulpero en la pulpería ubicada en Defensa 1344, pleno San Telmo. Antonio es jubilado de una sala de juego clandestina, vive en La Boca. Solo que, para nosotros, el pasado no condena; pues siempre puede redimirse. Claro, siempre que se quiera... Antonio es amigo de nuestro camarero Luis. Perdió su último trabajo a los 70 años, cuando cerró el Restaurante El Establo. Toda su vida había trabajado en negro. Lloró y el pulpero lo escuchó. Quería tener una parte de su sueldo no declarada por razones personales (¿para seguir cobrando subsidio?). El pulpero no dudó de la palabra de un hombre mayor, con la pesadumbre de un pasado militar en las islas Malvinas".
"Antonio se peinó y trabajó. Protagonizó nueve meses de terror en la pulpería. Por cierto, una babel a corazón abierto: la pulpería es la diversidad a toda honra, con más de nueve nacionalidades. Un camarero haitiano llamado Wellington me preguntó por qué no recibía las propinas que todo el equipo de la pulpería se comparte por igual. Antonio me contestó: ‘¿propina para un negro?'. Distintas veces veía su nariz roja, oliendo fuerte a alcohol. Me decía que debía estar triste y que mejor no empeorar el caso. La comprensión ante todo. ‘Antonio vuelve a casa para descansar". Nos vemos mañana".
"La pulpería incluye y promueve la inclusión. Distintas veces sus compañeros de trabajo me comentaron, avergonzados, que Antonio no quería atender mesa cuando pensaba que los comensales eran homosexuales. En la pulpería apoyamos la igualdad de género, contando con siete mujeres en nuestro equipo de trabajo. Antonio no las escuchaba y hasta podía llegar insultarlas, a miserable honra. La pulpería integra personas con discapacidades. Antonio se burlaba de las diferencias y yo fui testigo de una pareja de gente de pequeña altura a la cual decía: ‘para los enanos todo está reservado'. Por supuesto, cada una de estas situaciones inadmisibles era seguida de charlas sin fin, para explicarle por qué no compartimos estos valores y que él tenía que adaptarse".
"Antonio tuvo una verruga plantar. No vino a trabajar sin justificativo médico durante tres meses. Después nos envió una carta documento estipulando que estaba mal registrado e inició un juicio al pulpero. Tres años después de los hechos, la Jueza Nacional Patricia Silvia Russo intimó a nuestra Pulpería Quilapán a pagar $1.295.058 al demandante. O sea, 33.000 empanadas ó más de 4.000 pingüinos de vino patero. El pulpero felicita a Antonio Turnes y a su abogado Jorge Ferdman por esta victoria".
LAS BUENAS
"Más de 5.000 viandas gratis entregadas al personal médico y al comedor de San Telmo desde el principio del año. Fuimos seleccionados por el Ministerio de Turismo para recibir el Fondo de Auxilio y Capacitación Turística del Banco Interamericano de Desarrollo. Esto nos permitió capacitar a nuestro equipo y prepararnos para el mundo postpandemia".
"Esta ayuda nos va a permitir":
Instalar más termotanques solares sobre el techo y calentar el 100% de agua al sol.
Terminar el museo de la pulpería y dar a conocer los hallazgos que descubrimos en el pozo tapado allá por 1871, después de la epidemia de fiebre amarilla.
Habilitar el jardín y el Salón Macoco de la pulpería como Centro Cultural Independiente y bailar chacarera.
También estamos orgullosos de ser parte de los "Héroes de la cancha y de la vida" de la Copa CONMEBOL Libertadores.
"Héroe: persona común que enfrenta circunstancias extraordinarias, impulsado por el amor, la compasión y la empatía. Les deseo amor, compasión y empatía. Seamos héroes. Hagásmoslo juntos".
Esta es la historia. Qué difícil es ser gastronómico. Qué injusta es la Justicia, a veces. Qué costoso resulta ser solidario. Qué mala es cierta gente. Fuerza Pulpería Quilapán, la siguen peleando y son un ejemplo de superación. Cuando muchos de nosotros nos queremos rajar porque esto es un caos, esta pareja de franceses se aquerendó en estas tierras y la pelea contra viento y marea. Se merecen lo mejor.