21 de Marzo - Día Internacional del VermutMartes, 21 de marzo de 2023El vermut forma parte de la tradición argentina. Fue una de las bebidas más populares durante varias décadas, una costumbre arraigada en los bares de nuestro país. Tras un período en que bajó el consumo, hoy está nuevamente en las preferencias de los consumidores. En el Día Internacional del Vermut, que se celebra hoy 21 de marzo, les contamos cuáles son las tres opciones que tienen los vermuteros.
Ya no es noticia ni novedad que el vermut está viviendo en nuestro país un auge enorme. El crecimiento gradual y constante de su consumo ha impulsado, en los últimos años, la aparición de docenas de nuevas marcas, tanto por parte de bodegas como de productores artesanales.
Lo mismo ocurre con las vermuterías (cada vez más numerosas) y los bares, donde se lo usa en tragos y coctelería.
Es en este marco de crecimiento y expansión que hoy, 21 de marzo, se celebra el Día Internacional del Vermut. La elección de la fecha no es casual: es cuando comienza la primavera en el Hemisferio Norte y, en especial, en Europa, donde nació esta bebida.
La estación trae abundancia de flores y plantas necesarias para su elaboración y es, con ese esplendor de la naturaleza, que los maestros vermuteros piensan y preparan sus fórmulas de infinitas combinaciones posibles.
Pero, volviendo a nuestro país, el mercado actual está conformado por tres grupos que hasta el momento parecen convivir con inusual armonía.
El primero son las grandes marcas tradicionales, clásicas, disponibles en cualquier punto de venta, que han logrado captar al público joven a la vez de mantener a sus fieles consumidores de siempre. Al tener amplia capacidad de generar marketing y publicidad, son los que traccionan la movida y organizan los eventos de la fecha, dentro de un marco más amplio: la Semana del Vermut.
El segundo grupo lo integran los nuevos vermuts salidos de bodegas, que hasta poco tiempo atrás no tenían en cuenta la posibilidad de elaborarlos y comercializarlos. Tras el puntapié inicial y exitoso de La Fuerza, ya son varias las que se vienen sumando. Tienen presencia sobre todo en vinotecas, aprovechando las estructuras comerciales preexistentes.
Y luego viene el tercer grupo, el más vital y creativo para los consumidores y aficionados especializados: los vermuts artesanales. Un nicho mucho menor pero pujante y lleno de sorpresas.
Son docenas de pequeños productores en todo el país, con las limitaciones lógicas de presupuesto, volumen y distribución (muchos de ellos entregan en persona los pedidos), que apenas apoyados en redes sociales y bares alternativos llevan adelante sus emprendimientos, con resultados de alta calidad en la gran mayoría de los casos.
Más allá de cualquier segmentación, lo importante hoy es celebrar y disfrutar de una de las bebidas preferidas de los argentinos. ¡Salud, vermuteros!
El vermut forma parte de la tradición argentina. Fue una de las bebidas más populares durante varias décadas, una costumbre arraigada en los bares de nuestro país. Tras un período en que bajó el consumo, hoy está nuevamente en las preferencias de los consumidores. En el Día Internacional del Vermut, que se celebra hoy 21 de marzo, les contamos cuáles son las tres opciones que tienen los vermuteros.
Ya no es noticia ni novedad que el vermut está viviendo en nuestro país un auge enorme. El crecimiento gradual y constante de su consumo ha impulsado, en los últimos años, la aparición de docenas de nuevas marcas, tanto por parte de bodegas como de productores artesanales.
Lo mismo ocurre con las vermuterías (cada vez más numerosas) y los bares, donde se lo usa en tragos y coctelería.
Es en este marco de crecimiento y expansión que hoy, 21 de marzo, se celebra el Día Internacional del Vermut. La elección de la fecha no es casual: es cuando comienza la primavera en el Hemisferio Norte y, en especial, en Europa, donde nació esta bebida.
La estación trae abundancia de flores y plantas necesarias para su elaboración y es, con ese esplendor de la naturaleza, que los maestros vermuteros piensan y preparan sus fórmulas de infinitas combinaciones posibles.
Pero, volviendo a nuestro país, el mercado actual está conformado por tres grupos que hasta el momento parecen convivir con inusual armonía.
El primero son las grandes marcas tradicionales, clásicas, disponibles en cualquier punto de venta, que han logrado captar al público joven a la vez de mantener a sus fieles consumidores de siempre. Al tener amplia capacidad de generar marketing y publicidad, son los que traccionan la movida y organizan los eventos de la fecha, dentro de un marco más amplio: la Semana del Vermut.
El segundo grupo lo integran los nuevos vermuts salidos de bodegas, que hasta poco tiempo atrás no tenían en cuenta la posibilidad de elaborarlos y comercializarlos. Tras el puntapié inicial y exitoso de La Fuerza, ya son varias las que se vienen sumando. Tienen presencia sobre todo en vinotecas, aprovechando las estructuras comerciales preexistentes.
Y luego viene el tercer grupo, el más vital y creativo para los consumidores y aficionados especializados: los vermuts artesanales. Un nicho mucho menor pero pujante y lleno de sorpresas.
Son docenas de pequeños productores en todo el país, con las limitaciones lógicas de presupuesto, volumen y distribución (muchos de ellos entregan en persona los pedidos), que apenas apoyados en redes sociales y bares alternativos llevan adelante sus emprendimientos, con resultados de alta calidad en la gran mayoría de los casos.
Más allá de cualquier segmentación, lo importante hoy es celebrar y disfrutar de una de las bebidas preferidas de los argentinos. ¡Salud, vermuteros!