Volver a El Calafate

El Calafate es sinónimo de glaciares. Con el Perito Moreno a la cabeza. Pero es mucho más que eso. Las alternativas turísticas son muchísimas, más allá de este glaciar que es un símbolo de la Argentina, como lo son las Cataratas del Iguazú, la Quebrada de Humahuaca y tantos otros sitios de interés turístico que ofrece nuestro rico territorio.

En este viaje, contamos con la preciosa colaboración del grupo hotelero Tremun y de la Secretaría de Turismo de El Calafate. Nos alojamos en el Hotel Mirador del Lago (4 Estrellas), pudimos cenar en los restaurantes La Bahía y Patagonia DOC, y también disfrutar de dos de las excursiones más destacadas: navegación por el Lago Argentino y visita a los glaciares, que realiza la empresa Cruceros MarPatag, y al Cerro Frías de la agencia de turismo del mismo nombre.

Antes de entrar en tema, ni bien llegamos a la localidad santacruceña, nos quedamos pensando en cómo cambiaría todo si El Calafate contara con un centro de esquí. Significaría lisa y llanamente que la actividad turística se pudiera desarrollar todo el año, no solo en primavera y verano cuando se acentúa el flujo de visitantes, al tener un clima más benigno para realizar las excursiones.

A El Calafate van las siguientes compañías aéreas: Aerolíneas Argentinas, Jet Smart, LADE y Fly Bondi. El aeropuerto está ubicado a 20 kilómetros del centro de la ciudad, por una ruta que no es demasiado transitada, por lo que el trayecto no demandará más de media hora de viaje. Por el transfer para dos personas, pagamos 32.000 pesos, aunque seguramente en taxi pueda costar algo menos. También hay opciones para cuatro personas y grupos más numerosos.

UNA LARGA ESPERA

Las expectativas por este viaje eran muchas, ya que nuestra última visita había sido exactamente hace 17 años. Y con algo de nostalgia, por cuanto participamos aquella vez de una feria de vinos y, junto al querido amigo y colega Marcelo Murano vivimos una experiencia muy recordada, más aún porque él ya no está con nosotros y mucho se lo extraña.

Decir que vimos todo cambiado está seguramente de más. El Calafate hoy tiene vida propia y creemos que todo argentino debería poder visitar aunque sea una vez esta maravilla que nos depara la naturaleza.

La ciudad cuenta hoy, según el censo de 2022, con una población cercana a los 22.844 habitantes distribuidos en 9.595 viviendas. Y el crecimiento poblacional respecto de 2010, alcanza al 37%. Sin embargo, hubo una corrección del INDEC en noviembre del año pasado, que indica que la cantidad de habitantes correcta es de 25.586.

La ciudad está desarrollada a la vera del Lago Argentino, el más grande de nuestro país, con 1.466 kilómetros cuadrados. El panorama que ofrece a los visitantes es disímil, según se trate de la época del año. En esta visita, cuando aún no comenzó la temporada de deshielo, suele vérselo con menos agua, que no llega hasta la costa, como ocurre en la estación veraniega.

Un consejo para los visitantes desprevenidos, es que no hay que tenerle tanto respeto al frío, ya que si bien las temperaturas suelen ser bajas (aún en las noches de verano), se suele soportar mejor que cuando lo debemos soportar en Buenos Aires, por ejemplo.

En esta ocasión, la estadía fue en el Hotel Mirador del Lago (4 Estrellas), de la cadena Tremun, que tiene otros cuatro establecimientos en la localidad: Calafate Parque, Kau Yatún Hotel de Campo, Rincón del Calafate y Sent Calafate.

Máximo Álvarez Castillo es el director de Alimentos y Bebidas de estos cinco hoteles, y se encarga de ilustrarnos sobre la actualidad de la zona. Nació en Laprida, provincia de Buenos Aires; estudió gastronomía en el IAG; fue chef del Hotel Mirador de Lago; trabajó también en Los Pinos (Termas de Río Hondo) y Gran Panorama (Bariloche).

Luego volvió para hacerse cargo de su nueva responsabilidad. En la charla que mantuvimos sobre diversos temas vinculados con el turismo y la gastronomía del lugar, nos enteramos de aspectos que tienen que ver con el flujo de turistas (en esta temporada invernal que acaba de finalizar fue récord en materia de visitantes extranjeros), y con lo vinculado con la cocina.

Ya nos referiremos en una próxima nota sobre el Restaurante La Bahía sobre el segundo premio que obtuvieron en Hotelga y que los llena de satisfacción, de lo cual también informamos a nuestros lectores en su momento: https://www.fondodeolla.com/nota/19141-desde-el-calafate-un-plato-con-carne-de-guanaco/

Una novedad es que masividad con la cual ya se está utilizando la carne de guanaco (procede de la caza controlada, que consiste primero en encerrar a los animales para luego enviarlos a faena). Máximo asegura que es un producto muy valorado y, sobre todo, por el público extranjero. Es una carne magra, que debe comerse bien jugosa, dada la inexistencia prácticamente de grasa, debido a que los guanacos viven en manadas, guiando a las hembras un macho alfa, que a veces debe enfrentarse con otro congénere que pretende apropiarse de su harén).

Probamos la carne de guanaco en varias presentaciones, pero la que más nos llamó la atención fue en el tartar que nos ofrecieron en el restaurante del hotel, de lo cual ya les contaremos a los lectores.

El director de A&B del Grupo Tremun, dice que una de las premisas de trabajo es utilizar lo más posible los productos locales. Por ejemplo, ni hablar del cordero, que es un símbolo de la región patagónica. Solo basta recorrer las calles del centro para observar en todos los restaurantes los asadores, un sistema generalizado aquí, pero en desuso en otros lugares del país.

Algunos insumos habituales son por supuesto el fruto del calafate, que le da nombre al pueblo, muy presente en mermeladas, jaleas, helados, etcétera. Se puede comer como fruta fresca, pero contiene muchas pepitas y además tiñe todo lo que toca.

Y también hay trucha del Lago Strobel, rosa mosqueta, frambuesas, corinto, moras, cerezas (es especial llegan desde Los Antiguos) y ruibarbo, entre otros.

Un consejo para quienes compren frascos de calafate, es que se fijen la procedencia que debe ser local, ya que hay marcas que llegan desde Bariloche.

Y no omitir la compra de chocolate, otra gran tentación que nos ofrece El Calafate entre sus productos más típicos. Por ejemplo, los de la firma Guerrero, ubicada en la zona comercial del centro. 

 LAS EXCURSIONES

Hay muchas opciones para visitar, además del Glaciar Perito Moreno, que no debe faltar en ningún programa. Hay varias alternativas, como la caminata por las pasarelas, el Big Ice ("Viaje al centro del glaciar"), Safari Náutico.

La otra posibilidad, mucho más atractiva pero que demanda todo el día, es el Crucero Marpatag, que nos transporta al corazón de los glaciares, incluyendo el Upsala y el Spegazzini, y pasando muy cerca de los témpanos diseminados por el Lago Argentino.

Esta excursión también incluye una bajada en Puesto de las Vacas, ya que no debe sorprendernos que haya ganadería en las laderas de las montañas y en las costas del lago. En particular, este lugar está ubicado dentro del Parque Nacional Los Glaciares y llama la atención porque se identifica con un inmigrante finlandés, Harry Hilden, quien a principios del Siglo XX desarrolló la cría de ganado en la zona.

Otra visitamos fue la del Cerro Frías, ubicado en el camino entre El Calafate y el Glaciar Perito Moreno. Dentro de este predio se encuentra la Estancia Alice, en cuyo casco se puede almorzar luego de la recorrida, que además puede incluir trekking, cabalgatas y tirolesa.

Otra excursión muy requerida es la de El Chaltén, localidad ubicada a poco más de 200 kilómetros de El Calafate. Quienes estén entrenados, podrán un trekking inolvidable por la belleza del lugar. Hay distintas opciones para viajar por cuenta propia, o bien hacer tours de uno o más días.

También hay visitas a estancias como Alicia, La Usina, El Galpón y 25 de Mayo, además de practicar pesca con mosca junto al glaciar, y hasta hacer un paso de todo el día a Torres del Paine, en Chile.

Respecto a la gastronomía en El Calafate, en próximas notas nos referiremos a nuestra experiencia en los restaurantes La Bahía, Patagonia DOC y Humus.

DATOS ÚTILES

Avión: imprescindible llegar a El Calafate en avión, ya que la distancia con Río Gallegos es de 301 kilómetros, por una ruta aburrida e "interminable". Recomendamos sacar pasajes con tiempo y comparar precios entre AA y las dos low coast que llegan hasta allí (Jet Smart y Fly Bondi). LADE también vuelos, pero con menor frecuencia.

Hotelería: establecimientos de 4 estrellas, Mirador del Lago (@miradordellagohotel) y Calafate Parque (ambos del Grupo Tremun).

Excursiones: para el Glaciar Perito Moreno y navegación por el Lago Argentino incluyendo Uspsala y Spegazzini, consultar en Marpatag Cruceros IG: @marpatagcruceros - WhatsApp: +54 9 2966 725 682 (WhatsApp) mail: glaciares@crucerosmarpatag.com - Cerro Frías Tierra de Aventuras: reservascerrofrias.com - IG: @cerrofriasoficial

Comidas: La Bahía (Hotel Mirador del Lago), Patagonia DOC (Hotel Calafate Parque); Humus (Posada Los Álamos); La Tablita; Mi Viejo; Casimiro Biguá.