El pan dulce de Güerrín, una receta tradicional sin conservantes, llega para acompañar las celebraciones de fin de año. Salen con un peso de 1,3 kilogramos y se elaboran 600 unidades por día.
Como cada año, la Pizzería Güerrín ofrece su tradicional pan dulce, un clásico porteño que ya es sinónimo de las fiestas en Buenos Aires. Elaborado con una receta que data de 1952, este pan dulce mantiene intacta la calidad y el sabor original, gracias a su horneado en los emblemáticos hornos a leña, y al uso de procesos tradicionales, sin conservantes ni aromatizantes artificiales.
Con un peso de 1.3 kg y una producción diaria de 600 unidades, el pan dulce de Güerrín se destaca por su meticulosa selección de ingredientes, como miel, castañas de cajú, almendras, pasas de uva, nueces y fruta abrillantada, todo realzado con aromatizantes naturales.
Este pan dulce es un verdadero homenaje a los maestros italianos que dejaron su legado en la pastelería de Güerrín, y a la tradición que sigue viva en cada bocado.
Güerrín en números:
Desde 1932. se vendieron aproximadamente 10.216.000 pizzas
Cuenta con 5 hornos a leña
Venta diaria récord de pizzas: 2.500
Porciones de fainá vendidas diarias: 1.200
Cerveza por fin de semana: 3.500 litros
Vino moscato por fin de semana: 100 litros
Días en que se apaga el horno: nunca
Dirección: Av. Corrientes 1368. Abierto todos los días desde las 11:00.
Boûlan se suma a la celebración del Día Mundial del Croissant, una fecha especial para rendir homenaje a esta delicia de la pastelería, cuyo origen se remonta a la Viena del Siglo XVII.
La panadería artesanal Boûlan, presenta su propuesta estrella para estas Fiestas: el Panettone de lievito madre, con un proceso de elaboración que dura 9 días. Y, como siempre, ofrecen el pan dulce estilo genovés.
Cada 5 de enero, se festeja el Día Internacional de la Crema Batida y, desde Milkaut, comparten su tradición de casi un siglo en la elaboración de productos lácteos. Más que un simple ingrediente, la crema es una fuente de inspiración culinaria, capaz de transformar los platos cotidianos y aportar un toque distinto a cada preparación.