36 Billares menos y se nos pianta otro lagrimónJueves, 28 de noviembre de 2013Cierra otro símbolo de la ciudad y van... Ya nos quedamos sin la Richmond de la calle Florida, este año cerraron “La London” de la Avenida de Mayo y Perú, y ahora otro monumento histórico, “Los 36 Billares” correrá igual suerte.
Los empleados dieron la voz de alerta; es vox populi que el Bar “Los 36 Billares” ha sido vendido a los dueños de la cadena “La Continental”. A fin de año dejaría de funcionar como tal, para transformarse en una mediocre pizzería más. Una verdadera pena. Recuerdo qué diferente son las cosas en el vecino Uruguay, ya que nos tocó estar en Montevideo, hace algunos meses, cuando se anunciaba la venta de uno los históricos locales de “La Pasiva”, sobre la Avenida 18 de Julio. Más allá de que no sirve para nada, porque finalmente los comerciantes hacen su negocio, al menos hay que hacer un poco de ruido para que estas cosas no pasen inadvertidas como en nuestro caso.
Con 119 años en la Avenida de Mayo, el histórico bar Los 36 Billares fue vendido a La Continental, y a fin de año cambiaría de rubro y nombre. La ley vigente dice que las modificaciones al inmueble deberán ser aprobadas por las autoridades porteñas.
“Los 36 Billares” integra la lista de Bares Notables de la Ciudad de Buenos Aires. Si bien la reglamentación indica que se puede cambiar de rubro, los nuevos propietarios no deberían modificar la estructura del edificio, que se halla protegido porque se encuentra dentro del Area de Protección Histórica 1 y según las leyes vigentes, un inmueble de esta categoría sólo puede ser modificado parcial o totalmente con permiso del Ejecutivo porteño.
Una versión indica que las obras de remodelación comenzarían en enero de 2014, y se producirían reformas en el interior, donde hoy entran 160 personas sentadas en la planta baja. También se habla del cambio de nombre. Los empleados del bar trabajan ahí hace más de 20 años y temen por su futuro laboral. Y lo que genera más dudas, es saber qué pasará con el subsuelo, donde todavía funcionan las mesas de billar que le dan nombre al bar fundado en 1894. No habría más billares, ni tampoco los shows musicales en vivo. Por el local pasaron escritores famosos, como Federico García Lorca, que vivió un tiempo en el Hotel Castelar; Abelardo Arias y Juan Manuel Bavio Esquiú (más conocido por el seudónimo Juan Mondiola), entre otros. Hay una ley de la Física que asegura que “nada se pierde, todo se transforma”, pero en estos casos no se puede aplicar: “todo se pierde, todo se transforma y para mal”.
Los empleados dieron la voz de alerta; es vox populi que el Bar “Los 36 Billares” ha sido vendido a los dueños de la cadena “La Continental”. A fin de año dejaría de funcionar como tal, para transformarse en una mediocre pizzería más. Una verdadera pena. Recuerdo qué diferente son las cosas en el vecino Uruguay, ya que nos tocó estar en Montevideo, hace algunos meses, cuando se anunciaba la venta de uno los históricos locales de “La Pasiva”, sobre la Avenida 18 de Julio. Más allá de que no sirve para nada, porque finalmente los comerciantes hacen su negocio, al menos hay que hacer un poco de ruido para que estas cosas no pasen inadvertidas como en nuestro caso.
Con 119 años en la Avenida de Mayo, el histórico bar Los 36 Billares fue vendido a La Continental, y a fin de año cambiaría de rubro y nombre. La ley vigente dice que las modificaciones al inmueble deberán ser aprobadas por las autoridades porteñas.
“Los 36 Billares” integra la lista de Bares Notables de la Ciudad de Buenos Aires. Si bien la reglamentación indica que se puede cambiar de rubro, los nuevos propietarios no deberían modificar la estructura del edificio, que se halla protegido porque se encuentra dentro del Area de Protección Histórica 1 y según las leyes vigentes, un inmueble de esta categoría sólo puede ser modificado parcial o totalmente con permiso del Ejecutivo porteño.
Una versión indica que las obras de remodelación comenzarían en enero de 2014, y se producirían reformas en el interior, donde hoy entran 160 personas sentadas en la planta baja. También se habla del cambio de nombre. Los empleados del bar trabajan ahí hace más de 20 años y temen por su futuro laboral. Y lo que genera más dudas, es saber qué pasará con el subsuelo, donde todavía funcionan las mesas de billar que le dan nombre al bar fundado en 1894. No habría más billares, ni tampoco los shows musicales en vivo. Por el local pasaron escritores famosos, como Federico García Lorca, que vivió un tiempo en el Hotel Castelar; Abelardo Arias y Juan Manuel Bavio Esquiú (más conocido por el seudónimo Juan Mondiola), entre otros. Hay una ley de la Física que asegura que “nada se pierde, todo se transforma”, pero en estos casos no se puede aplicar: “todo se pierde, todo se transforma y para mal”.